… declaraciones explosivas que afectan, no solo a la marcha de la guerra, con las operaciones militares que parece favorecen a los rusos en el Donbass; en el momento estratégico, que ha hecho que Putin lo celebrase como una victoria justo al año de la invasión, como si ya hubiese ganado la guerra, a la vez que en el otro lado apareciese Biden en Kiev como si no pasase nada, mientras las explosiones de los cohetes rusos sonaban a lo lejos de Kiev…
La presencia de Biden ha sido un golpe de efecto estratégico, por el apoyo moral y efectivo para Zelenski, con el compromiso de todo el bando de naciones occidentales de seguir apoyando a Ucrania.
Eso no ha hecho más que empezar, pues Turquía ha aceptado que Suecia y Finlandia se unan a la OTAN, lo que es como un bombazo estratégico a Rusia. Pero esta ha reaccionado con la declaración de que suspende su participación en el Tratado START de armas nucleares.
A su vez las naciones de la OTAN han reafirmado su apoyo a Ucrania hasta el final. Parece pues que pueden pasar dos cosas: que se inicie la contraofensiva rusa o bien sea el inicio de las conversaciones de paz. Ya veremos si los esfuerzos y declaraciones de los políticos al más alto nivel sirven para detener esta guerra del siglo XXI, con las operaciones de desgaste, o bien se alcance una paz negociada.
Gonzalo Parente