En 1807, so pretexto de conquistar Portugal, atraviesan los Pirineos las tropas napoleónicas con la inconfesada intención de ocupar España. Siete meses después, el 2 de mayo de 1808, Madrid se levanta contra ese ejército: es el inicio de la comúnmente conocida como “Guerra de la Independencia”.
Pues bien, el nombre, “Guerra de la Independencia”, es absolutamente desafortunado, una manifestación más del escaso acierto de los españoles a la hora de enfocar, presentar y transmitir su historia. Y lo es por muchas razones que voy a intentar explicarle a Vd en las siguientes líneas. (...)