LA CRÍTICA, 22 MARZO 2023
En 1975, tras dos años de estancia en la Universidad de Wisconsin en Madison (USA), realizando estudios graduados e investigaciones bajo la tutela académica del historiador-hispanista Stanley G. Payne y del politólogo Charles W. Anderson, publiqué mi primer libro (en realidad un librito) titulado Los orígenes del fascismo en España (Tucar, Madrid, 1975), y me incorporé a las conspiraciones antifranquistas como miembro de la Junta Democrática de Madrid.
En esta alianza/oposición de las izquierdas en la Transición conocí al catedrático Ramón Tamames, que entonces era un destacado dirigente (secreto) del PCE con un perfil muy acusado de “eurocomunista” al estilo italiano del PCI de Enrico Berlinguer, aunque a mí siempre me pareció más socialdemócrata que comunista. (…)