LA CRÍTICA, 31 AGOSTO 2025
31/08/2025@10:09:10
El final del mes de agosto nos trae consigo la confirmación de que vivimos en un paradigma acelerado y desconocido. Las crisis políticas, sociales y tecnológicas convergen en un septiembre que se avista como un precipicio.
Tradicionalmente, este era el mes en que las sociedades bajaban las revoluciones, los parlamentos enmudecían y las redacciones se llenaban de noticias livianas. Era un espejismo consentido, un paréntesis necesario antes de la "vuelta al cole" y al fragor de la realidad. Pero el agosto de 2025 ha sido cualquier cosa menos una pausa. Ha sido un eco constante, la reverberación de las múltiples crisis que ya no se toman vacaciones. Cerramos el mes no con la sensación de haber descansado, sino con la certeza de que el ruido de fondo es ahora la melodía principal de nuestro tiempo. (...)