El futuro de España, de Diego Hidalgo (2ª parte)

... En principio se pregunta: ¿Se puede explorar el futuro? El famoso pensador Chomsky parece que le dijo al autor que investigar el futuro era imposible, pero el autor piensa que es necesario estudiar las posibles evoluciones o saltos de vacío hasta de cincuenta años. Esto no es un capricho, más bien una necesidad que hay que practicar, tanto para estudiar la política como las oportunidades empresariales. En este sentido se ofrecen varios métodos de estudio: Extrapolaciones; previsiones; visiones y análisis de escenarios. Esto último consiste en estudiar distintos acontecimientos y sus alternativas. A continuación el autor se pregunta: ¿Prevalece la política sobre la economía? Afirma que sí, pero reconoce que lo más racional sería lo contrario, por eso señala el caso español, donde se producen desacuerdos entre las medidas económicas que toman los políticos, creando enfrentamientos sociales.

Como punto de partida toma el 1996, recién terminada la guerra fría, cuando se iniciaba un nuevo período histórico y muchos países tuvieron que elegir entre la economía planificada o la de mercado libre. Una dirigida por el Gobierno, mientras que en la otra actuaba el sector privado y el comercio. La diferencia consistía en que en la segunda se actuaba con más libertad y fomentaba el progreso. Se pudo comprobar con los resultados de desarrollo económico alcanzados por unos y otros sistemas. Todo ello sirvió para la transformación de las estructuras, tal como ocurrió en España primero y en Polonia después. Estas transformaciones produjeron una crisis en el estado de bienestar.

Entra después el autor en la que llama “Tendencias Globales Básicas”, estableciendo una serie de hipótesis: Comienza siguiendo el proceso de globalización que afectaría a una extensión del comercio internacional donde pronto surgieron numerosos conflictos entre las potencias que practican el comercio internacional; los países diversos jugaban a su modo la globalización internacional; se preveía un aumento de la población mundial (8 mil mil.) hacia el año 2025; el desarrollo tecnológico sería a favor de los países ricos; a pesar de la convergencia de países ricos y pobres, seguirán las desigualdades; la revolución tecnológica, la información y los servicios afectarán a la agricultura; se producirá un cambio estructural en la industria; alrededor del año 2030 habrá gran desempleo con los cambios en el sector industrial; crecerá una mayor preocupación por el medio ambiente y un gran aumento de la emigración.

Basado en las anteriores hipótesis establece los siguientes escenarios: El primero, se refiere al capitalismo de gran poder, que después del fin de la guerra fría está dominando el mundo. Segundo, considera un nuevo capitalismo más humano llamado socialdemócrata que se hace más atractivo para los diversos grupos geopolíticos. A continuación va presentando las condiciones más destacadas como resultado de la globalización económica y las oportunidades que pueden ofrecer las innovaciones tecnológicas, pero que restan tiempo para estar con la familia y llevan al lector hacia los grandes avances que sin duda afectarán a la humanidad, para acercar las personas a las máquinas… ¡qué peligro…!