Por fin y después de más de cuatro años de lentos y obligados trámites ha sido definitivamente autorizado el campo de vuelos de Astorga, aeródromo situado entre las localidades de la Carrera y Sopeña en el término municipal de Villaobispo de Otero, ayuntamiento próximo a Astorga.
La iniciativa surgió de un grupo de enamorados de la aviación de Astorga y León allá por el 2012 cuyas cabezas visibles eran Antonio Mandayo y Roberto Alonso que pretendían disponer de un campo de vuelos en la Maragatería donde poder disfrutar a precios asequibles de los deportes aéreos y que sirviera de escala para los numerosos aficionados de la provincia y del resto de España.
El campo dispone en la actualidad de un hangar y un anexo como edificio de servicios susceptible de ser ampliados próximamente según las necesidades. Consta de una pista corta de 400 m y otra principal de tierra compactada de más de 800 válida para ultraligeros, motoveleros y la mayoría de avionetas convencionales.
Después del estudio de impacto ambiental publicado en una extensa y prolija disposición de 10 folios en el BOE n 298 del 10 de diciembre de 2014 solo faltaba la autorización definitiva de las autoridades aeronáuticas y esta fue otorgada el pasado 29 de enero por la Dirección de Seguridad de Aeropuertos y Navegación Aérea dependiente de AESA (Agencia Española de Seguridad Aérea).
El Aeroclub de Astorga amplía el número de aeroclubs “legales” de la provincia (Pajares de los Oteros, Santa María del Páramo, León y Villamarco) pues algún otro funciona de forma atípica de manera provisional o como campo eventual.
Los deportes aéreos siempre tuvieron gran aceptación en la provincia llegando a celebrarse competiciones y campeonatos mundiales como en el caso del ahora “dormido” aeródromo de Chozas de Abajo.
Desde la Crítica de León deseamos felices vuelos a los socios e integrantes de este aeroclub y animamos a los aficionados al turismo aéreo a disfrutar de la Maragatería.