La Vanguardia / EFE
Uno de los grupos que integran la CUP, Corrent Roig, ha decidido abandonar la candidatura CUP-Crida Constituent por su desacuerdo con el pacto con Junts pel Sí, que ven de "extrema gravedad" porque cuestiona su "rol rupturista" al supeditarlo a un Govern "sumiso" a la Unión Europea, que además pondrá "trabas" al camino hacia la "república catalana".
En una carta publicada en su web, Corrent Roig, una corriente que formaba parte de la CUP, esgrime así los motivos que la han llevado a abandonar la CUP-CC tras el acuerdo de estabilidad parlamentaria firmado con Junts pel Sí.
Según Corrent Roig, este pacto marca un "antes y un después" que cambia "radicalmente las cosas", ya que supone asumir su "mal llamado" plan de choque social y su hoja de ruta soberanista, renunciando con ello a su "independencia" política.
"Para nosotros este acuerdo es un hecho de extrema gravedad. (...) Cuestiona el rol rupturista de la CUP-CC al supeditarlo a un Govern sumiso a la Unión Europea y a la Troika y, por tanto, contrario a los intereses del pueblo trabajador", argumenta Corrent Roig en su misiva.
Asimismo, Corrent Roig considera que el ejecutivo catalán será una "traba en el camino de la ruptura" y, en consecuencia, en el "camino de la proclamación" de la república catalana". Es un "Govern que habrá que combatir", sentencia Corrent Roig.
El acuerdo, prosigue Corrent Roig, "condena" a la CUP a convertirse en el "ala izquierda parlamentaria" del Govern y la llevar a "batallar por las migajas" dentro del marco de la "miseria" impuesto por la Unión Europea y el Gobierno.
En este sentido, Corrent Roig ha criticado el apoyo de la CUP a la prórroga de los Presupuestos de la Generalitat.