Hace algunos días publiqué en este periódico La Crítica un artículo sobre el Eje Europeo como “espina dorsal del cuerpo de Europa” donde franceses y alemanes actualmente intentan enderezar la maltrecha estructura continental… pues bien, ha ocurrido todo lo contrario (…)
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con la reunión el 27 pasado de Macron y Scholz en Paris, ante una de las más importantes crisis que soporta la Unión Europea, obteniendo un resultado decepcionante y pobre por las diferencias entre los dos países sobre temas tan importantes como la energía nuclear y la defensa europea, con diferentes criterios nacionales, cuando Francia es nuclear y los alemanes han prescindido de esta energía.
El ambiente de la reunión fue frío y tenso, con pobres resultados que dejan las soluciones para tiempos futuros. Pero el caso es que los riesgos y amenazas que sufren los países de la Unión Europea exigen planes y determinaciones para afrontar esta situación bastante crítica.
Así, mientras las grandes naciones discuten sus prioridades, los distintos organismos de la Comisión siguen batallando con planes y proyectos para asegurar la defensa militar y económica de los países que componen Europa.
Gonzalo Parente