Francisco Ansón Oliart

“Mini-antología” amputada sobre el cambio climático

(Foto: https://computerhoy.com/noticias/life/cientificos-descubren-vinculos-calentamiento-global-clima-extremo-547379)

LA CRÍTICA, 29 AGOSTO 2021

Francisco Ansón Oliart | Domingo 29 de agosto de 2021
De pocos artículos, o quizá de ninguno, he recibido tantas opiniones y tan diversas, como de los que he publicado en este periódico sobre el cambio climático. Me voy a permitir hacer una “mini-antología” que reproduce, agrupadas, dichas opiniones (contando con la brevedad que impone un artículo de periódico). (...)

... Como no reproduzco, la totalidad del artículo, resulta injusto para el autor. Es como presentar un cuerpo, que ciertamente se reconoce que es él, pero amputado (por eso, he buscado artículos de esas opiniones, todos en el mundo digital y así facilito la referencia concreta y asequible de cada una de ellos). Espero no incurrir en un abuso de los derechos de autor. De los derechos morales, es claro que no, por cuanto cito con todo detalle a sus autores y fuente de publicación.

Debido a que se han politizado muchas de las decisiones sanitarias, se considera que se está haciendo lo mismo con el cambio climático. He aquí, una acertada síntesis de esta opinión expresada por el excelente periodista Eulogio López, en sus artículos de los días 13, 14 y 15 de este mes en hispanidad.com.

“EL APOCALIPSIS CLIMÁTICO ES LA MADRE DE TODOS LAS MENTIRAS (I). Pobres profetas de la tragedia climática: nunca aciertan
Además, ¿y si el cambio climático fuera bueno?…
El pánico creado por el Covid no da para más. Ahora toma el relevo el cambio climático… el cambio climático ha cogido el testigo del covid para atemorizar a la humanidad.
Pues bien, para empezar, una aportación de un experto sobre el cambio climático, estrella mediática del mes de agosto. Ahí va:
Desde que tenemos constancia, el clima ha oscilado de periodos fríos a cálidos. Siempre. Paradójicamente, los más fértiles y provechosos para la humanidad han sido los más cálidos. Hacia el siglo III, para los romanos, y el ‘óptimo medieval’, que hiciera tener viñas a los londinenses. Fueron mejores por la sencilla e irrefutable razón de que las plantas crecen mejor en el calor que en el frío. Es tan simple como que los árboles detienen su crecimiento en invierno (y pierden las hojas) y lo reanudan en primavera y verano. Nada mejor para una planta que calor y agua…
No hablo de “ensuciar” los ríos o el mar, incluso concedo lo de contaminar una ciudad como México o Pekín. Hablo de la atmósfera. La huella del hombre, aún existiendo, es ínfima comparada con los desastres naturales como los volcanes. Y además… hasta es beneficiosa. Las plantas crecen mejor en un invernadero que al exterior. La gente de campo tememos las noches de invierno sin nubes, esas que hacen que ‘caiga el helazo’ y arrase todo lo que empezaba a brotar. Qué fértil es sembrar miedo en las feraces mentes de los ignorantes”.
Así mismo, hace una relación de las predicciones sobre el cambio climático y se constata que ninguna se ha cumplido.

Otra opinión se refiere a que si bien es cierto que existe un cambio climático, la solución no es la que se propone remedando a la madre naturaleza. De entre las diferentes soluciones elijo la que analiza, el 18 de este mes, en elconfidencial.com, con acierto y objetividad, Sarah Romero.

“POR QUÉ PLANTAR MILLONES DE ÁRBOLES NO ES LA SOLUCIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO
Las plantaciones masivas de árboles que están iniciándose en todo el mundo, sueñan con ayudar a compensar las emisiones actuales y también eliminar las emisiones de CO₂… que están calentando el clima de la Tierra a niveles que nunca antes habíamos experimentado… Como consecuencia, las grandes capas de hielo se están derritiendo a ritmos alarmantes, lo que contribuye al aumento del nivel del mar y a que fenómenos meteorológicos extremos como los huracanes y las sequías sean cada vez, más graves…
Hay que tener en cuenta que sería imposible plantar suficientes árboles para absorber la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera causada por la quema de combustibles fósiles del ser humano. Nunca habrá tantos árboles como para compensar nuestras emisiones. Así que proyectos como los que lanzó el Foro Económico Mundial en enero de 2020 bautizado como “Un Trillón de Árboles” o la Campaña del trillón de árboles de Plant-for-the-Planet, muestran, en realidad, un exceso de entusiasmo… Y los árboles no pueden con todo. Los bosques absorben 16.000 millones de toneladas métricas de CO2 al año, aproximadamente, según un estudio publicado en la revista Nature Climate Change
Pero la actividad humana puede convertir a los bosques en fuentes de carbono. ¿De qué forma? Gracias a la tala indiscriminada (para tierras de cultivo), los incendios forestales y la quema de productos de madera; convirtiéndose los mismos bosques en emisores de aproximadamente 8.100 millones de toneladas de gas a la atmósfera… La única solución viable es avanzar hacia la energía verde.”

También existen los que opinan que las medidas que se están adoptando sobre el cambio climático, no son las adecuadas y apuestan por medidas artificiales. José María Carabante comenta, muy oportunamente y poniendo el dedo en la llaga del verdadero problema, el libro del científico y activista mediático Michael Shellenberger, No hay apocalipsis, en el servicio de 21 de julio de este año, en aceprensa.com.

“FOMENTAR EL DESARROLLO ECONÓMICO PARA COMBATIR EL CAMBIO CLIMÁTICO
Michael Shellenberger, activista climático, sostiene en No hay apocalipsis que el alarmismo medioambiental lleva a tomar decisiones equivocadas.
Mucha gente quizá no sepa que las emisiones de gases de efecto invernadero se han reducido considerablemente durante los últimos diez años en los países más desarrollados…
Se calcula, además, que entre 1981 y 2016 el planeta ha reverdecido un 40% gracias no sólo a la plantación masiva de árboles, sino a la reconversión de tierras agrícolas en pastizales y bosques. En opinión de este ecologista norteamericano, lo que se necesita para hacer frente a los desafíos climáticos no es menos desarrollo, sino más.
Convengamos con el autor de No hay apocalipsis en que la mejor manera de luchar contra el cambio climático sea promoviendo el desarrollo económico. ¿Cómo subvenir a las necesidades energéticas que este plantea sin deteriorar aún más la atmósfera? Su prescripción es la energía nuclear.
Las renovables no son únicamente más caras, más difíciles de acumular y más inestables. Se puede decir, además, que, frente a la nuclear, son más sucias porque requieren más materiales, generan residuos… Según las estimaciones, entre 1995 y 2018 se gastaron alrededor de 2 billones de dólares en energía nuclear y 2,3 billones en fuentes eólicas y solares, pero la primera generó más del doble de electricidad”.

Aquí, en España, la casi totalidad de los españoles creen en la existencia del cambio climático, cuya causa principal atribuyen a la actividad del hombre, si bien, más de la mitad, se admiran de que los propios científicos no se pongan de acuerdo sobre la existencia de dicho cambio. Emilio Chuvieco, también en aceprensa.com, el pasado 11 de febrero, da noticia de estos datos y proporciona otros muchos que parecen incontestables.

“LOS CIENTÍFICOS Y LOS ESCÉPTICOS ANTE EL CAMBIO CLIMÁTICO
En un reciente estudio del Real Instituto Elcano sobre la opinión de los españoles ante el cambio climático, se observa un acuerdo generalizado sobre la importancia del problema (piensan que es el más importante al que se enfrenta el mundo) y sobre su atribución principalmente humana (el 92% está de acuerdo). En una de las contestaciones más llamativas de esta encuesta, el 59% opina que los científicos no se ponen de acuerdo sobre la existencia del cambio climático…
En un reciente artículo que resume los trabajos publicados en revistas científicas en las últimas décadas, se indica que, de aquellos que investigan las causas del cambio climático, el 97% lo atribuyen al factor humano, por solo el 3% que lo hacen a causas naturales (Cook et al., 2006). Conviene recordar que las bases científicas que fundamentan la hipótesis de que existe un cambio climático de origen humano son muy sólidas, proceden de disciplinas muy variadas y avaladas por los mejores equipos de investigación del mundo. No existe ninguna academia de ciencias de ningún país que haya publicado informes críticos sobre la hipótesis del cambio climático de origen humano,… A partir de mediciones de satélite, se ha observado una pérdida de casi 3,4 millones de km2 de hielo marino estival en el Ártico entre 1980 y 2020 (-12,2% por década), con valores más bajos en hielo invernal (-2,6% por década). Aunque en la Antártida el efecto es menos evidente, también se observan pérdidas muy relevantes en el sector occidental, el más masivo (Shepherd et al., 2020)…
A partir de esas simulaciones, y por encima de que algunos lugares pueden verse beneficiados por el calentamiento (por ejemplo, temperaturas más benignas en latitudes boreales que puedan permitirles introducir nuevos cultivos), la velocidad y la magnitud de los cambios estimados apuntan a consecuencias muy negativas para el conjunto del planeta si se mantienen las actuales tasas de emisión. Entre los efectos sobre los que existe bastante consenso científico están el aumento del nivel del agua del mar,… con sus impactos sobre la enorme población costera del planeta y la frecuencia de inundaciones, las olas de calor (que afectarían a la salud,… a los incendios forestales y las cosechas), la pérdida de glaciares (impactando sobre todo a los países con menos capacidad de embalsar agua), la frecuencia de tormentas tropicales, y los cambios en los vectores de transmisión de algunas enfermedades”.

Finalmente, existen los que opinan que el cambio climático se debe exclusivamente a la acción del hombre y que los científicos están de acuerdo. He aquí lo que escribe Por Colaboración.

“¿TENEMOS TIEMPO Y SABIDURÍA SUFICIENTE PARA EVITAR LA CATÁSTROFE?
El día 8 de agosto de 2021 el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) publicó su informe, que se hace cada dos años, sobre la situación climática de la Tierra, fruto de la investigación de más de cien expertos de 52 países. Nunca el documento tuvo tanta claridad como ahora, a diferencia de los informes anteriores. Antes se afirmaba que era un 95% seguro que el calentamiento global era antropogénico, es decir, de origen humano. Ahora se sustenta sin restricciones que es consecuencia de los seres humanos y de su forma de habitar la Tierra, especialmente, por causa del uso de energías fósiles (petróleo, carbón y gas) y de otros factores negativos”. (¿Tenemos tiempo y sabiduría suficiente para evitar la catástrofe? | DiarioHispaniola l Un digital a tu alcance).

Me queda no sólo a mí sino también al lector que confirme, modifique o matice su opinión sobre la existencia o no del cambio climático, el grado de acuerdo de los científicos, la posible contribución del hombre al dicho cambio, así como la cuantía de esa contribución, las medidas adoptadas para paliarlo o suprimirlo en su caso y la utilización política y económica que se está haciendo de mismo.

Francisco Ansón