Enrique D. Martínez Campos

Carta abierta sobre Gibraltar (XII)

Base aérea de la RAF en Gibraltar. (Wikipedia).

EN RELACIÓN CON GIBRALTAR

Enrique D. Martínez Campos | Sábado 13 de febrero de 2021
Queridos amigos: Todos sabemos que Gibraltar supone para Gran Bretaña la posesión de una excepcional base naval con un aeródromo de la RAF que la complementa. Es su valor geoestratégico lo que más les interesa. (...)

... Si además se van añadiendo ventajas de otro tipo a ese valor, como el interés de EEUU para que sus primos permanezcan en la base, las facilidades que encuentran en las debilidades de los gobiernos de España en estos últimos 45 años, su expansionismo terrestre y marítimo con la connivencia de los colaboracionistas del otro lado de la Verja, el famoso chantaje de los “trabajadores españoles transfronterizos”, el régimen fiscal del Peñón, el blanqueo de dinero, el contrabando, etc., se nos presenta un cuadro verdaderamente difícil para que, tal y como decidió la ONU, Gibraltar sea descolonizado.

Han sido tremendas las concesiones del gobierno socialcomunista de España para llegar al acuerdo-marco de Nochevieja. Ha accedido a lo que es muy perjudicial, a medio y largo plazo, para los intereses de España: tragar con el caramelo de crear una zona de supuesta “prosperidad compartida” en la que todas las ventajas caen del lado de GB y de Gibraltar.

Porque el interés norteamericano para que se mantengan allí sus primos es evidente. El 28 de noviembre pasado llegó a la bahía de Algeciras el submarino nuclear USS Seawolf. El 1 de diciembre entraba en Gibraltar para ser reparado. La información del Ayuntamiento gibraltareño fue escueta: “Un submarino de la Armada de EEUU arribará esta tarde (1 de diciembre) a la base naval de Su Majestad en Gibraltar para una visita de soporte logístico programada”. Con un reactor nuclear de 45.000 CV de potencia y una tripulación de 134 marineros.

Sólo la asociación “Verdemar”, de Ecologistas en Acción, protestó: “Pedimos de una vez por todas que Gibraltar quede libre de artefactos de propulsión nuclear y otros buques que son auténticas bombas flotantes” (refiriéndose a los “buques gasolineras”).

¿Dio el gobierno de España alguna explicación? ¿Se movilizó a nivel nacional el progresismo ecologista? El submarino permaneció allí 10 días reparándose mientras llegaba de Nápoles una serie de aviones USA al aeródromo de la RAF con piezas de repuesto para el submarino.

No acabó ahí el trasiego en ese hospital de buques nucleares que es Gibraltar. El 3 de febrero pasado entró en el puerto otro submarino nuclear británico, HMS Trident de la clase “Trafalgar”, que le darán de baja para el servicio este año. En 2007 le hicieron reparaciones por valor de 386 millones de libras y en 2009 una de sus reparaciones fue por pérdida de energía de sus motores nucleares. ¿Dijo algo el gobierno de España? ¿Exigió alguna explicación a GB?

De otra parte, la famosa Verja fue construida por los británicos en 1909 en el istmo que no podían ocupar (pero que ocuparon). El trazado de la Verja se completó por España en 1954 para que los hijos de… la GB no siguieran avanzando hacia el norte paso a paso.

En el famoso acuerdo-marco de Nochevieja, la ministra de Exteriores, González Laya, ha hecho una dejación de funciones sobre la soberanía de Gibraltar de proporciones siderales. Mejor dicho, todo el multitudinario gobierno de España. En lugar de endurecer de forma contundente el trasiego de personas y mercancías por la Verja tras el Brexit, lo permite de modo que los gibraltareños se pueden pasear por el resto de España como Pedro por su casa.

Y así, el alcalde del pueblo, Picardo, declaró: “Según el acuerdo de Nochevieja, sólo Gibraltar decide quién entra en Gibraltar, y ningún agente español (guardia civil o policía) realizarán controles de ningún tipo en el aeropuerto ni en el puerto de Gibraltar, ni ahora ni en los próximos cuatro años. Ésta es nuestra tierra”. Así de claro y contundente. Según Picardo, será FRONTEX quien controlará esa frontera (en el puerto y en el aeródromo). Él es un súbdito de la Corona Británica y como tal actúa.

Decíamos que la dejación de funciones de González Laya fue tremenda, pues en el Acuerdo del Brexit entre la UE y GB, la única mención a Gibraltar es la siguiente: “El presente Acuerdo no se aplicará a Gibraltar ni tendrá efectos en dicho territorio”. Es decir, dejaba la puerta abierta a España para que actuase como considerase conveniente. Además de que el Tribunal de Justicia de la UE confirmó en 2017 que Gibraltar no forma parte de GB porque es un territorio por descolonizar.

¿Qué necesitaba más el gobierno de España (me niego a llamarle gobierno español) para poder haber presionado a GB como lo hizo la UE?

A mediados del pasado mes de enero el descontrol de tráfico de personas a través de la Verja procedentes del mismo Gibraltar, de Londres y otros lugares bajo bandera británica con dirección a La Línea, San Roque, Sevilla, Madrid, etc., provocó un caos total en los contagios de la peste china. ¿Por qué sucedió esto? Porque, según González Laya, “después de 300 años habíamos dejado de resolver cuestiones que les preocupan a los ciudadanos, como la competencia fiscal, vertidos en la bahía, precios del tabaco, contrabando… Esas son las cuestiones que a muchos nos importan, además de reivindicar la soberanía”. ¿Cuándo ha reivindicado, ante todo, la soberanía? A este gobierno lo que le interesa es el comercio justo y que “los ciudadanos pueden compartir la prosperidad”, ¿la prosperidad de quién? En realidad, lo que le importa más es la diferencia de precio de un cartón de tabaco en La Línea y Gibraltar que la soberanía sobre el Peñón. Ese es el acuerdo-marco al que se ha llegado.

Con un matiz añadido más. España tiene que demostrar a GB que se porta muy bien con Gibraltar a través de las llamadas “medidas de confianza”. Por ejemplo:

-Un buque de cualquier país no puede entrar en puerto español antes o después de haberlo hecho en Gibraltar. A partir de ahora esa limitación debe eliminarse en beneficio de la colonia.
-No se permite que los aviones con destino o salida de Gibraltar sobrevuelen una zona prohibida sobre la bahía de Algeciras. A partir de ahora deberán permitirse esos sobrevuelos.
-Si el antiguo puerto de Gibraltar se fue ampliando por los británicos a costa de ocupar aguas jurisdiccionales españolas, España deberá dar por buenas esas ampliaciones.
-Si les hace falta combustible para sus barcos y aviones, la refinería de Algeciras deberá suministrarles todo lo que necesiten como medida de confianza para que en la base militar no falte de nada.
-Si el aeródromo de la RAF colapsa por cualquier motivo, podría ser utilizado el de Málaga como alternativa para no dejar tirados a los pasajeros de la zona Schengen.

Por tanto, hablar de medidas de confianza es hablar de cesiones de España a GB y, por tanto, a Gibraltar. Porque lo importante para este gobierno socialcomunista es la supuesta “prosperidad compartida”. Lo de la soberanía es cuestión secundaria e, incluso, trasnochada para el progresismo globalista de socialistas y comunistas.

Y todo ello a pesar de que el tema del contrabando y blanqueo de capitales en la colonia militar británica preocupa en Bruselas, en el Consejo de la UE: Gibraltar no ha demostrado una investigación y enjuiciamiento eficaces en los delitos de blanqueo de capitales.

Estamos ya a mediados de febrero de 2021. La UE está negociando un Acuerdo sobre Gibraltar sabiendo que esta colonia puede seguir siendo un lugar privilegiado de blanqueo de capitales y otros delitos punibles. Sin embargo, ¿a quién le importará más mantener el statu quo actual? ¿A la UE o a GB? Sobre todo cuando el progresismo brutal de la política española, que era quien tenía que haber puesto condiciones durísimas para ese Acuerdo, ha claudicado sobre el tema de la soberanía y ha aceptado lo del espacio Schengen en Gibraltar.

Creo que la respuesta es muy clara y sencilla.

Un fuerte abrazo,

Enrique Domínguez Martínez Campos
Coronel de Infantería DEM (R)