... Tímidamente hizo una llamada a una “unidad y lealtad” que en el fondo no desea pues el grueso de sus intervenciones eran cifras y datos dudosos -cuando no descaradamente falsos- para confundir y fustigar a los futuros colaboradores.
Los portavoces de la oposición estuvieron dignos, educados y más moderados de lo que nos tienen acostumbrados. Casado condicionó su intervención a un apoyo -al menos al grueso de medidas del estado de alarma- que desveló de inmediato lo que moderó su alocución. Abascal dejó claro desde el principio que no quería ser cómplice del gobierno en sus desvaríos y propuso un texto alternativo que incluye confinamiento, test masivos y medidas sociales. Bal Francés de Ciudadanos, en su línea, ofreció de manera ostentosa una mano (solo la izquierda). El resto de portavoces plurales no alineados con Sánchez bien por su brevedad en especial la Sra Oramas cada vez más mordaz e incisiva.
De alguno de los aliados -si se les puede llamar tales pues muchos se abstuvieron- nada nuevo. Una de arena y dos de cal. Echenique -obsesionado con la ultraderecha- moderado y previsible, Rufián soberbio (no en su acepción de sublime), Errejón -con carita autista de “Good Doctor”- propuso medidas médicas sin dejar de botar a dos manos una pelota imaginaria que solo él ve. Del resto destacar los agradecimientos a los que nos atienden y las continuas referencias a citas de canciones. Está claro que el Dúo Dinámico está pegando fuerte.
Mención aparte merece la intervención de la portavoz socialista. Si alguien pensaba que ese partido pretende algo parecido a buscar apoyos fuera de sus socios que pierda toda esperanza. Todo fueron soflamas, reproches, falsedades e insultos a todo lo que se menea que no sea izquierda. Esta persona lastrada por su ideología, sus carencias y sus odios fue incapaz de transmitir otra cosa que inquina, repulsión, saña y rencor con sus vomitivas palabras. Esto no es pleno de control para continuar el estado de alarma. Es otra cosa.
Mal augurio el de esta portavoz de cara a unos futuros pactos para salir de las consecuencias de la pandemia. Sánchez no ha ofrecido una mano, no. Ha lanzado un guante pero desgraciadamente es un guante de nitrilo usado, contaminado y mortal. Allá el que lo recoja.
Respecto a la -en el Pleno desafortunada “desescalada”- (término que en alpinismo no existe y es sustituido simplemente por descenso) más vale que se refieran a la curva logarítmica, pues -sin cuerda de seguridad- como se refieran a la lineal el trompazo será mortal.
¿Lo aprobado? Está claro. Seguiremos confinados y entre contradicciones, correcciones, bandazos y manipulaciones, algún día podremos sacar un ratito a nuestros niños de recreo. Pero hoy no. ¡MAAÑANA!