El historiador y catedrático Luis PALACIOS BAÑUELOS ha llevado a cabo una importante labor de investigación histórica desde el Instituto Universitario de Humanidades de la URJC. Estas investigaciones se han convertido en unos sesenta libros dedicados a la Institución Libre de Enseñanza, a la historia de Andalucía, a las Humanidades y, sobre todo, a la España contemporánea. Destaca su última obra “Las bases de la España actual”, editado por Dilex en 2017, que incluye cinco volúmenes: Segunda República, Guerra civil, Franquismo, Transición y reinado de Juan Carlos I.
Sus núcleos de interés intelectual son, fundamentalmente, las Humanidades y España. A las Humanidades ha dedicado muchos años y esfuerzos para que formen parte de los programas de todas las titulaciones universitarias pero con escaso éxito; a casi nadie le interesa pues se piensa que eso de las humanidades es algo del pasado. España, especialmente su historia, es para el Prof. Palacios el tema central de su trabajo y reflexión. Considera fundamental que se conozca la Historia de España de manera que los españoles sepamos qué es nuestro país y en qué consiste ser españoles. La situación actual de contestación a todo lo construido desde la Transición le lleva a preguntarse en este libro: en cuarenta años de democracia ¿es que no hemos sido capaces de construir una España aceptada por todos? ¿es que los españoles no somos capaces de trabajar juntos por un futuro mejor?
En estos momentos tiene en imprenta un libro titulado “La España soñada. Regenerar a través de la educación: José Castillejo en el entorno de la ILE” y dirige la Revista digital “La Albolafia”, coeditada con el Instituto de Humanidades.
"... Desde unos comienzos inciertos, tras el final de la dictadura, a unos años plenos de ilusión, seguidos de años de realizaciones, se ha configurado el camino de la democracia española; un camino similar al de nuestra portada: bordeado por logros magníficos, como la Constitución –ese espléndido y solemne pino–, y también por errores –como esos fresnos secos–. Pero así es la historia, así es nuestra historia de estos cuarenta años, de luces y sombras.
He planteado el libro con un sentido de utilidad. Deseo que sirva para conocer mejor lo que es España y para que los españoles sepamos mejor en qué consiste eso de ser españoles. Su punto de partida es una interrogación: ¿estamos ante el final de un ciclo histórico? La justificación de esa pregunta está en el repaso que hago de la realidad con una serie de flashes para buscar las razones de los aciertos y fracasos detectados al repasar los cuarenta años de nuestra historia democrática; consta, por ello, de dos partes diferenciadas, una más ensayística y el resto estrictamente histórica.
Un entendimiento adecuado de la España actual –que es la protagonista del libro– requiere acudir a sus antecedentes inmediatos –la Guerra civil y franquismo– y detenerse en la Transición. Para ello echo mano de mi obra Las bases de la España actual (5 volúmenes, Ed. Dilex, 2017). Los veinticinco primeros años de democracia los denomino “Una España moderna, alegre y confiada”. Son años en los que el país, de la mano de los presidentes Suárez, Calvo-Sotelo, Felipe González y Aznar, se moderniza y disfruta del bienestar logrado. La siguiente etapa, que califico como “Una España perpleja, de dudas y crisis”, comienza cuando la obsesión revisionista y el radicalismo del presidente Rodríguez Zapatero siembran dudas y pesimismo sobre nuestra historia; es una etapa que, alimentada por la crisis, sigue abierta con el Gobierno de Mariano Rajoy. No hace falta recordar aquí el papel que el rey tiene en una monarquía parlamentaria, como la española, pero sí destacar el que Juan Carlos I ha jugado a lo largo de cuarenta años.
Entre los problemas que me he encontrado como historiador no ha sido el menor el tener que historiar una etapa vivida por mí. Que, si, en una buena parte, es una historia cerrada, en otra, es una historia in fieri que difícilmente puede huir del presentismo. Porque, como Cervantes escribe en El Quijote “…uno es escribir como poeta y otro como historiador: el poeta puede contar o catar las cosas, no como fueron, sino como debían ser; y el historiador las ha de escribir, no como debían ser, sino como fueron, sin añadir ni quitar a la verdad cosa alguna” (Parte II, cap. III). Y es que la historia necesita el poso y reposo, que solo dan el tiempo. Mi máxima preocupación es lograr, en lo posible, ser objetivo y lo intento buscando prioritariamente la verdad, sustentanda en documentos y testimonios. Cuando se trata de historia del presente –la breve etapa de Felipe VI– me limito a reseñar hechos, evitando toda interpretación.
El texto que presento es deudor a mi libro “El reinado democrático de Juan Carlos I”, debidamente ampliado y sintetizado cuando ha sido necesario. Intento hacer de esta historia una narración ágil, fácil de entender, sin que nunca pierda el rigor; preocupado más del proceso histórico que de la anécdota. He evitado toda referencia erudita prescindiendo de notas a pie de página, bibliografía comentada, etc. pues, en último caso, puede acudirse al libro matriz.
Pero, insisto, me interesa prioritariamente España y creo que ha llegado el momento de dar a nuestra nación la preponderancia y la importancia que debe tener para todos los españoles, sin complejos; más aún, con la convicción de que los equivocados son los otros, los que tratan de olvidarla o destruirla."
La Albolafia (Montepríncipe), 1 de junio de 2018.
Luis Palacios Bañuelos
CONTENIDO
NOTA PRELIMINAR 11
CAPÍTULO I. ¿ESTAMOS AL FINAL DE UN CICLO HISTÓRICO? 15
CAPÍTULO II. ESPAÑA CAMINA HACIA LA DEMOCRACIA 39
CAPÍTULO III. UNA ESPAÑA MODERNA, ALEGRE Y CONFIADA 83
CAPÍTULO IV. UNA ESPAÑA PERPLEJA, DE DUDAS Y CRISIS 211
CAPÍTULO V. REINADO DE FELIPE VI 297
POST SCRIPTUM 308
BIBLIOGRAFÍA 317